Seguro de salud y tarjeta restaurante: los beneficios sociales más valorados en PyMEs

La implementación de los beneficios sociales supone un incremento en la motivación y satisfacción de los empleados, un mayor sentimiento de pertenencia a la empresa y, por tanto, un aumento de su productividad y rendimiento. 

Sin embargo, de acuerdo con el Estudio de Retos y Tendencias en RR. HH. 2024 de Pluxee, solo el 27% de las pequeñas empresas (menos de 50 trabajadores) y el 55% de las medianas (entre 50 y 250 empleados) ofrecen a sus empleados beneficios adicionales al salario. Un contexto que puede poner en situación de desventaja a las PYMEs en la guerra por el talento respecto a las grandes empresas, que ofrecen este tipo de beneficios en un 63% de los casos. 

Un vistazo al papel de las PyMEs en España

Las PyMEs y micro-PyMEs son todas aquellas empresas que cuentan en su plantilla con un máximo de 250 trabajadores y que no superan un volumen de negocio por encima de 50 millones de euros o un balance general de 43 millones¹. Su papel resulta fundamental para el crecimiento europeo y representan el 99% de las empresas que existen en la UE, según el Parlamento Europeo. Según datos del Ministerio de Industria y Turismo, las Pequeñas y Medianas Empresas (PYMEs) representan el 99,7% del tejido empresarial español y dan empleo al 59% de los trabajadores asalariados españoles. 

Por el contrario, el 0,3% de grandes empresas (con más de 250 empleados) ocupan al 41% restante. , datos que confirman su relevancia en el tejido económico y empresarial de nuestro país, y la importancia de aplicar estrategias que contribuyan a su fortalecimiento y al de su plantilla.

La importancia de los beneficios para empleados en las PyMEs

Mientras que la inflación, la rentabilidad del negocio o el acceso a la financiación son algunos de los desafíos más evidentes para las PYMEs, es importante no perder de vista -por su relevancia para la continuidad del negocio- la atracción y la fidelización del talento en este tipo de empresas. 

A la hora de elegir un trabajo, los profesionales ya no solo se guían por las condiciones salariales, sino que tienen en cuenta también otros aspectos, como que la compañía ofrezca medidas de conciliación que les permita combinar su vida laboral, personal y familiar. Este es, precisamente, uno de los objetivos principales que se pretenden con los beneficios sociales. Además de esta percepción del tiempo como un valor fundamental, con este sistema de retribución, los trabajadores maximizan sus salarios netos al ahorrarse gastos derivados de la jornada laboral, como son el transporte público, las comidas en restaurantes, la guardería o la formación. Se trata, en definitiva, de una forma de mejorar la calidad de vida y bienestar de los empleados y busca evitar la rotación de personal, uno de los grandes retos a los que siempre se enfrentan las PyMEs.

Diferencias entre beneficios sociales y retribución flexible

Cuando hablamos de beneficios para empleados, es habitual que ambos términos se confundan. Sin embargo, aunque los beneficios sociales y la Retribución Flexible tengan algunos puntos en común, existen también diferencias sustanciales entre las dos. La principal está en el coste que suponen para el empleado. Lo veremos a continuación:

Beneficios sociales

Los beneficios sociales forman parte del paquete retributivo de los trabajadores, son una remuneración complementaria a su salario bruto y es la propia PyME la que asume la totalidad del coste de los servicios. Además, estos beneficios cotizan a la Seguridad Social y son totalmente deducibles del Impuesto de Sociedades.