Todo lo que debes saber sobre el contrato en prácticas 2024

Todo lo que debes saber sobre el contrato en prácticas 2024

26 Agosto 2024

¿Estás pensando en incorporar talento joven a tu empresa? ¡Perfecto! Los contratos en prácticas son una excelente opción para formar a futuros profesionales y encontrar a los candidatos ideales.

Pero, ¿sabes en verdad cómo funcionan? En este artículo te desvelamos los detalles que necesitas conocer sobre los contratos en prácticas en 2024, para que tomes decisiones informadas y cumplas con la normativa laboral vigente.

¿Qué es un contrato en prácticas?

¿Cómo asegurarte de que el talento no solo es prometedor, sino también competente?

Aquí entra en juego el contrato de trabajo en prácticas, una herramienta para moldear profesionales cualificados. Imagina poder ofrecer a un recién graduado la oportunidad de transformar su conocimiento teórico en habilidades prácticas.

El contrato en prácticas no es solo un acuerdo laboral, es un compromiso con el desarrollo profesional de tu empleado, que se ajusta a su nivel académico.

Este contrato permite que tu empleado no solo adquiera esa experiencia, sino que también desarrolle habilidades prácticas en un entorno que complementa su formación.

Quienes pueden optar por este contrato son desde estudiantes universitarios hasta especialistas con formación profesional de nivel 3. Cada uno tiene un espacio en este esquema.

Incluso se extiende a personas con discapacidad, quienes pueden encontrar en tu empresa un entorno inclusivo para desarrollar sus capacidades.

Contrato en prácticas según la reforma laboral 2024

Un contrato bien hecho es el primer paso hacia una gestión del talento exitosa. ¿Has considerado la importancia de documentar cada contrato en prácticas por escrito?

Es mucho más que un trámite. Es el pilar de una relación laboral clara y confiable. Imagina que no se realiza este paso esencial. ¿Sabías que se asume de forma automática un contrato indefinido a jornada completa? No dejes que la ambigüedad marque el inicio de tu vínculo con los futuros talentos de tu empresa.

Desde el 1 de enero de 2024, con la Reforma Laboral, en el contrato en prácticas se ha vuelto imperativo que todos los estudiantes en prácticas, ya sean remunerados o no, contribuyan a la Seguridad Social. Esto incluye a los estudiantes universitarios y a aquellos en formación profesional.

Además, los incentivos a la contratación no son solo un beneficio, sino una inversión en el futuro de tu empresa.

Al ofrecer contratos formativos, no solo estás cumpliendo con un requisito, sino que estás fomentando el crecimiento y la especialización de tus empleados. Y si decides incluir a personas con discapacidad, recuerda que hay una reducción en las cuotas empresariales.

Por último, la duración de los contratos en prácticas es tan necesaria como su contenido. Con un mínimo de 3 meses y un máximo de 1 año, estos ofrecen una ventana de oportunidad tanto para tu empresa como para el becario.

Requisitos para acceder a un contrato en prácticas

Los requisitos para un contrato en prácticas están sujetos a una normativa concreta:

  • Contar con una formación sólida, ya sea universitaria, de formación profesional o mediante certificados profesionales. Debe entregar una copia para comprobar.
  • El título debe ser reciente, obtenido hace no más de 3 años. Si tiene una discapacidad, este periodo se amplía a 5 años.
  • Si estudió fuera de España, solo necesita que el título se encuentre homologado en el país y el cómputo se hará en la fecha en que se hizo el proceso.
  • Los empleados que hayan superado los tres meses en un contrato formativo dentro de una misma empresa quedan excluidos de la posibilidad de firmar un contrato en prácticas. A menos que sean becarios y esas prácticas sean parte del currículo necesario para obtener su título.
  • No contar con experiencia laboral bajo un contrato de prácticas por un período de un año en ninguna empresa.

Ventajas y desventajas de un contrato en prácticas

Los puntos fuertes que destacan son:

  • El contrato en prácticas permite a los jóvenes profesionales adquirir experiencia en su campo laboral, lo que es necesario para su formación y desarrollo profesional.
  • Al optar por contratos en prácticas, garantizas que tus empleados estén amparados por la seguridad social desde el inicio, asegurándoles cobertura frente a imprevistos, y muestras el compromiso de tu empresa con su bienestar.
  • Los practicantes gozan de los mismos derechos que cualquier otro empleado en tu plantilla, como descansos y vacaciones en contrato en prácticas. Esto refleja la equidad y el respeto que tu empresa tiene por todos sus colaboradores, sin importar su nivel.
  • Un contrato en prácticas no es solo un trampolín inicial; es una puerta abierta a una carrera prometedora dentro de tu empresa. Con el talento y el desempeño adecuados, estos jóvenes profesionales pueden convertirse en piezas clave de tu equipo a largo plazo.
  • La flexibilidad de los contratos en prácticas te permite ajustar tu fuerza laboral a las fluctuaciones del mercado, al mantener así la competitividad y agilidad de tu empresa.
  • Al integrar practicantes en tu equipo, no solo estás fomentando el crecimiento de talento joven y dinámico, sino que también te beneficias de incentivos económicos que aligeran la carga financiera y potencian la inversión en el futuro de tu empresa.

Por otro lado, las desventajas de un contrato en prácticas también debes considerarlas:

  • Aunque son una puerta de entrada al mundo laboral, la duración del contrato en prácticas suele limitarse a un año, lo que plantea desafíos para quienes buscan estabilidad a largo plazo.
  • El contrato puede terminar en cualquier momento, sin necesidad de causa justificada. Esto trae incertidumbre para el practicante.
  • Aunque el contrato en prácticas tiene derechos laborales similares a los del contrato indefinido, puede ser considerado como un contrato temporal por algunos empleadores o sindicatos, lo que provoca desigualdades en la aplicación de las normas laborales.
  • Según la legislación española, los contratos en prácticas no son para personas mayores de 30 años. Es una de las grandes desventajas de un contrato en prácticas porque trae limitaciones para aquellos que buscan cambiar de carrera o sector laboral más tarde en su vida profesional.

Suscríbete a nuestra newsletter

¡No te pierdas nada! Suscríbete ahora y recibe las últimas novedades y estudios para mejorar el bienestar de tu equipo 🚀

Características de un contrato en prácticas

Dentro de las características de los contratos en prácticas, existen particularidades que los distinguen de otros regímenes laborales:

Salario en un contrato en prácticas

En España, el contrato de trabajo en prácticas se ajusta a un esquema porcentual basado en el salario base del puesto o categoría correspondiente. Entonces, ¿cuánto se cobra en un contrato en prácticas?

Durante el primer año, te aseguras de que el salario en un contrato en prácticas no sea menor al 60% del establecido para el grupo profesional de tu empleado, mientras que en el segundo año, este porcentaje aumenta al 75%.

Hay que tener en cuenta que la remuneración por el trabajo desempeñado no puede ser menor al umbral establecido por el Salario Mínimo Interprofesional. Para el ejercicio del año 2024, este límite se ha fijado en 1,134 euros al mes.

Por ejemplo, si el salario bruto anual estándar es de 20,000 €, el cálculo para saber cuánto se cobra en un contrato en prácticas para el primer año sería de 12,000 € anuales, lo que se traduce en 1,000 € brutos al mes.

Para el segundo año, hablamos de 15,000 € anuales o 1,250 € mensuales. Estas cifras son referenciales y siempre se ajustarán al SMI para garantizar la justicia salarial y el respeto a la legislación vigente para el salario en un contrato en prácticas.

Duración y renovación del contrato en prácticas

Debe comprenderse la importancia de la correcta formalización porque es una de las características de un contrato en prácticas.

Los contratos en prácticas deben plasmarse por escrito y se debe detallar la cualificación del empleado, la duración del contrato en prácticas, el rol a desempeñar, así como las horas y su distribución, en especial si se trata de una jornada parcial.

Tras la formalización, dispones de un margen de 10 días para notificarlo al SEPE. La duración mínima del contrato en prácticas es de seis meses, con un límite máximo de un año. Solo permite una única prórroga que no exceda el total de doce meses.

En situaciones de baja, el tiempo se detiene y, si al concluir el contrato, tu empleado sigue trabajando, se considerará prorrogado de forma automática.

El fin del contrato ocurre al cumplirse el plazo acordado, aunque tanto tú como tu empleado pueden terminarlo con un preaviso de 15 días si supera el año. De no respetarse este preaviso, se perderán esos días de salario o trabajo.

El contrato también puede finalizar si tu empleado no pasa el período de prueba del contrato en prácticas o en casos de despido disciplinario o por causas objetivas, al ser este último el único que requiere indemnización de 20 días de salario por año de servicio. En ese momento, deberás entregar el correspondiente certificado.

Vacaciones y beneficios en un contrato en prácticas

Las vacaciones en un contrato de prácticas, sin excepción, son de 30 días naturales de vacaciones o, si lo prefieres, 22 días laborables por año.

Además, es importante que sepas que tienen derecho a una compensación proporcional por las pagas extraordinarias y las vacaciones no tomadas.

En cuanto a las bonificaciones, tu empresa puede obtener un alivio significativo del 100% en los seguros sociales al contratar a alguien bajo un contrato en prácticas, siempre y cuando se cumpla con la normativa vigente.

Recuerda: no existen bonificaciones específicas para contratos de formación. Por último, ten presente que aunque tus empleados en prácticas contribuyen a la seguridad social y al desempleo, tu empresa podría reducir estas cotizaciones si se ajusta a los requisitos legales.

Periodo de prueba en un contrato en prácticas

Tu empresa debe respetar la normativa vigente sobre los periodos de prueba. En el caso de empleados que poseen cualificaciones de grado medio o certificados de profesionalidad de nivel 1 o 2, la duración de este periodo no debe exceder de treinta días.

Aquellos con títulos de grado superior o certificados de nivel 3 tienen un periodo de prueba en un contrato en prácticas de hasta dos meses. Asimismo, se puede finalizar la relación laboral con tu empleado durante el período de prueba sin necesidad de preaviso.

Derecho a retribución flexible en un contrato de prácticas

Aunque no hay un derecho a retribución flexible en un contrato de prácticas en 2024, tus empleados con este tipo de contrato tienen derechos laborales establecidos en la legislación y en los convenios colectivos, que incluyen la retribución y la cotización a la Seguridad Social.

¿Cómo pasar de un contrato de prácticas a indefinido?

La transición a un indefinido exige cumplir una serie de requisitos para un contrato en prácticas:

  • Si tu empleado tiene un contrato de prácticas por más de un año sin comunicar el fin del contrato, la relación laboral se considera indefinida.
  • Se le informa a tu empleado si se decidió no continuar con el contrato laboral, aunque no se requiere un periodo de preaviso.
  • Al pasar un contrato de prácticas a indefinido, no solo estabiliza la plantilla, sino que también conlleva incentivos económicos. Durante los próximos tres años, tu empresa podrá disfrutar de una reducción en las contribuciones a la seguridad social, que asciende a 500 euros anuales. Este beneficio se incrementa a 700 euros anuales si es mujer.   
  • Antes de hacer efectiva la conversión de pasar de un contrato en prácticas a uno indefinido, asegúrate de entregar a tu empleado el certificado de prácticas, que refleje la duración del contrato en prácticas, el puesto y las tareas realizadas.    
  • El Real Decreto-ley 2/2023 obliga a cotizar a la Seguridad Social por todos los practicantes, independientemente de si son remunerados o no.

Los contratos en prácticas ofrecen una oportunidad única tanto para empresas como para jóvenes recién titulados. Una relación laboral sana se sustenta en el conocimiento mutuo de los derechos y obligaciones para asegurar un equilibrio entre las partes.

Si estás considerando contratar a un empleado en prácticas, te recomendamos que te informes a fondo sobre la normativa vigente luego de la reforma laboral en el contrato en prácticas.