Wellness vs. Well-being corporativo
5 Septiembre 2019
Uno de los temas cada vez más importantes en las organizaciones actuales tiene que ver con el bienestar de sus empleados. El trabajo ocupa cerca de una tercera parte del tiempo de cada trabajador, y por eso es fundamental que la empresa tome medidas destinadas al cuidado de su salud y bienestar. Estas medidas impactan muy positivamente también en la satisfacción y motivación de la plantilla y, del mismo modo, repercuten en la empresa mejorando la capacidad de atracción y retención del talento, aumentando la productividad de la empresa y generando un ahorro más que sustancial.
Ahora bien, la creciente conciencia de los últimos años en mejorar el bienestar de los empleados ha dado lugar a nuevos conceptos para su aplicación. En los últimos años, destacan dos términos en inglés: wellness y well-being. Hablamos de dos términos anglosajones que, traducidos al español, significan lo mismo: bienestar.
A continuación, vamos a analizar ambos conceptos, wellness y well-being, con sus similitudes y diferencias.
Wellness corporativo: el bienestar físico de los empleados.
Este primer término tiene como objetivo principal llevar a los empleados hacia el bienestar promoviendo una vida activa y saludable. Para ello, las técnicas de wellness se centran en buscar el bienestar trabajando el ámbito físico del empleado a través de todo tipo de acciones que promuevan la vida sana.
Por eso, cuando hablamos de wellness corporativo, no nos referimos a un número limitado de acciones, sino a un amplio abanico de medidas que se clasifican en las siguientes categorías:
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Alimentación saludable: No se puede entender una vida saludable sin mantener una alimentación saludable. En este sentido, si tu empresa dispone de cocina, provee a tus empleados de productos frescos y naturales. Si contáramos con una máquina expendedora, sustituye los snacks por opciones más saludables. Otra opción es contratar a un nutricionista que asesore a nuestros empleados a través de charlas o talleres sobre alimentación saludable.
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Actividades físicas. . Por ejemplo, organizando una carrera benéfica animamos al personal a practicar deporte mientras generamos un sentimiento de comunidad entre la plantilla. Organizar clases de baile, torneos de fútbol o sustituir las tradicionales reuniones en la oficina por un paseo por el parque son otras actividades donde se practica ejercicio.
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Otras ideas.. En las grandes empresas es cada vez más normal la presencia de salas de yoga dentro de las oficinas. Practicar ejercicio dentro de la oficina es un aspecto altamente valorado por los empleados. Pero, aunque para muchas empresas sea inviable la instalación de gimnasios dentro de la oficina, es posible promover el wellness corporativo sin necesidad de hacer grandes inversiones: proporcionar escritorios adaptables para trabajar de pie a aquellos empleados que deseen mejorar su postura física o cofinanciar la cuota del gimnasio son claros ejemplos de ello.
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Hacia un bienestar íntegro: el well-being corporativo.
Existe hoy en día una tendencia a considerar al bienestar personal como algo que trasciende lo meramente físico. En su lugar, el bienestar es una cuestión que depende tanto del aspecto físico como del psicológico.
Siguiendo esta concepción, tenemos el well-being corporativo, una estrategia de bienestar que entiende la salud como un todo que incluye tanto la parte física como el apartado psicológico y emocional. De esta manera, conseguiremos que nuestros trabajadores lleven una vida más saludable, pero también los acercaremos a estados mentales y emocionales positivos.
Muchas de las medidas de well-being coinciden con las de wellness, ya que ambas promueven el bienestar físico. Pero, como las medidas de wellness se centran únicamente en la salud física, las implementaciones del Wellbeing corporativo incluyen también medidas destinadas a otras cuestiones:
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Ayuda psicológica. Al igual que muchas empresas ofrecen seguro médico, es posible ofrecer asistencia psicológica a los empleados para promover un mayor bienestar emocional.
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Talleres de mindfullness. El mindfulness es otra herramienta ideal para ayudar al empleado a controlar sus emociones. El mindfulness está de moda en el mundo empresarial, ya que se trata de un tipo de meditación que ayuda a los trabajadores a alcanzar un mayor grado de concentración, potenciando su rendimiento y su conciliación.
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Formación para el empleado. Ofrecer cursos de formación ayudará a tus empleados a ascender en su carrera profesional. De esta manera, conseguiremos una mayor satisfacción y motivación en la plantilla..
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Flexibilidad laboral. Muchos trabajadores argumentan que llevan un mal equilibrio entre la vida laboral y profesional por pasar demasiado tiempo en la oficina. Medidas como la jornada flexible o el teletrabajo tienen un impacto directo en la conciliación y son una modalidad cada vez más valorada por los empleados.
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Actividades para los empleados. Se puede fomentar el well-being corporativo también desde un punto de vista social. Así, mediante actividades que se realizan fuera de la oficina como las cenas de empresa, las tardes afterwork —quedadas de empresa en un bar o pub— o las sesiones de team building como scape rooms, fomentamos la sinergia, la comunicación y el buen ambiente entre los empleados.
